Filmus: “Una vez más, Macri vetó una ley que afecta los derechos de las personas con discapacidad”

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En este caso, se trata de un sistema para adaptar los semáforos existentes para los ciegos. El Senador advirtió que, haciendo un promedio, el  Jefe de Gobierno de la CABA “veta una ley cada 15 días”. Con este último veto, la cifra asciende a 87.

El senador nacional por el Frente para la Victoria, Daniel  Filmus, repudió hoy, los tres nuevos vetos efectuados esta semana por el Jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri   y afirmó: “Los vetos en cuestión marcan claramente una dirección ideológica contraria a la ampliación de derechos, a la inclusión social o a la solución de los problemas de aquellos que más necesitan un Estado presente, como la gestión de Macri ya viene demostrando hace más de cuatro años.”

Filmus se refirió de esta manera a los últimos tres vetos de Macri: el efectuado sobre la Ley N° 4020,-del legislador Juan Cabandié- que tiene por objeto la adaptación de los semáforos existentes en el ámbito de la CABA, incorporando la tecnología necesaria para el uso autónomo de personas ciegas y disminuidas visuales. En diciembre pasado, Macri vetó la  Ley N° 3961,  que  adhiere a  lo dispuesto por la Ley Nacional N° 22.431, que  contempla que las personas con discapacidad tienen derecho a viajar gratuitamente a cualquier destino del país, inclusive la Ciudad.

En segundo lugar, vetó la Ley N° 4019, que declaraba de utilidad pública y sujeto a expropiación al Cine Teatro Aconcagua, ubicado en Mosconi 3360, para convertirlo en un Centro Cultural para todos los vecinos. De esta manera los vecinos de la Comuna 11 pierden un edificio emblemático, en su valor cultural e histórico, además de la posibilidad de contar con un centro cultural para el barrio.

Por último, vetó una ley que otorgaba un subsidio de carácter mensual y vitalicio a músicos mayores de 65 años, que residan desde hace por lo menos 15 años en el distrito y acrediten una trayectoria de 20 años. (Ley N°  4021)

Y agregó: «El veto a 87 leyes no sólo es grave por el deterioro institucional que supone desoír las decisiones de la Legislatura y de sus propios legisladores – de hecho las últimas tres iniciativas vetadas fueron apoyadas por el PRO – es grave también porque la mayoría de eran leyes sustantivas que significaban importantes avances en políticas públicas”.